Asegurar un fondo algodonero de $ 50 millones

ENTREVISTA. El diputado Castor López y referente de Recrear en la provincia, es fiel a su visión de la economía. Sostiene que el país debe atraer más inversiones para que crezca la oferta. Su idea es hacer ahorro en época de euforia económica y no exagerar el gasto público. Bajar retenciones a la exportación y otorgar crédito fiscal.


“Hoy los precios de los commodities son tres veces superiores a los que tenía Raúl Alfonsín, los productos que compra China al país son superiores a los que cien años atrás compraba Inglaterra; se puede decir que en los 150 años de vida institucional nunca hubo un contexto internacional tan favorable en los famosos términos de intercambio económico. La carne y los granos le están ganando a la tecnología”, resalta el ingeniero Castor López al empezar la entrevista en 2007 antes de las elecciones a legisladores nacionales, que reproducimos por primera vez en este medio.
El ingeniero vial hizo un posgrado en la Universidad Torcuato Di Tella (1997), en Buenos Aires, cuando Murphy decide ingresar al mundo de la política. Aclara que no encontraron desde Recrear la forma de marcarle la cancha al matrimonio Kirchner.


- Si fuera ministro de Economía, ¿cuál es la primera medida o las medidas para seguir creciendo?
- La primera medida es quitar todos los impuestos al trabajo a las Pymes. La Segunda es quitar un punto porcentual, cada trimestre, de las retenciones a las exportaciones de carnes y granos. Otra es dar crédito fiscal a toda la envergadura económica: los impuestos, débitos y créditos bancarios, y las ganancias. Además todas las inversiones privadas van a ser amortizadas en un solo años, o sea, las empresas van a poder registrar en el primer año el 100% de sus caudales. La idea es provocar una fuerte atracción de las inversiones para seguir creciendo sin inflación.

- Aterrizando en la provincia, ¿cómo analiza el sector agropecuario?
- Santiago del Estero tiene un énfasis importante el sector agropecuario; por ejemplo, es necesario disminuir el 1% las retensiones a las exportaciones de carnes y granos hasta su eliminación definitiva. De esta manera propiciamos la cadena agroindustrial en la provincia. También asegurar un fondo algodonero, no menos, de 50 millones de pesos; defender la Ley Forestal de Usos Múltiples ante el avasallamiento de la ley propiciada por el diputado nacional (Miguel) Bonasso. En tanto, el congreso debería sancionar una norma para que el 100% de los débitos bancarios sean tomados como crédito, de esta manera se bajará la presión fiscal en el sector privado para que haya más inversiones. A su vez, se permitirá que se registren las inversiones privadas el primer año, porque si una empresa invierte en tecnología o infraestructura contablemente tiene que desgravar a lo largo de un par de años, entonces si se aplica en un solo año disminuye el impuesto a las ganancias.

- ¿Cuál es su análisis del sector textil?
- El mercado textil algodonero en la provincia es un cultivo ortodoxo y tradicional de largo plazo, puede sufrir avatares de precios pero se puede sostener para que se genere la cadena agroindustrial. Hoy se cultiva, desmota, se hace hilandería, se procesa y, en el futuro, se podrá exportar desde Santiago. Entonces, el Estado nacional debe crear un fondo especial cuando haya buenos precios para compensar cuando estos caigan.

- El país pasó, tal vez, la crisis energética más alta de su historia, ¿qué importancia tiene un plan energético anticrisis para el 2008?
- Muy importante. En el caso de la provincia es crucial que se termine la tercera línea Bracho-Santiago del Estero, es una obra demorada, pero llega a su conclusión. Pero respecto de la crisis se muestra la ausencia de planificación nacional, salvo unos parches, porque se ve el crecimiento de la demanda y una oferta de energía estática que no ha tenido incremento de generación y transporte, esto es por la ausencia de señales claras del Gobierno y por falta de un clima de inversión.

INDEC K
- Dicen que no hay inflación o hay poca y que los números del INDEC son objetivos. ¿Es un peligro manipular los guarismos de la inflación?
- Hay inflación y, si se opina en contrario, se está tergiversando la realidad. Es una inflación que se sitúa en el orden del 25% anual y en crecimiento. Este número a partir que el INDEC se transformó en INDEC K, no tenemos otra alternativa que monitorear los ingresos públicos, ya que están creciendo en el orden del 35% anual, están basados fuertemente en IVA y el impuesto a las ganancias, ambos son tributos a la producción y sobre las personas físicas y jurídicas. Entonces, miramos el 35%, y si le quitamos 2 puntos de eficiencias de la AFIP, y le quitando 8 puntos más al crecimiento económico genuino, llegamos a los 25 puntos. Esto no tiene otra explicación que un efecto precio, ese es la línea lógica para determinar el impacto de la inflación.

- ¿Qué opinión tiene de la política agropecuaria más allá de las retenciones?
- El agro está sufriendo una presión fiscal tremenda en retenciones a granos y carnes, que no se encuentra explicación alguna. En el país no se come tanta soja, ya que no habría inconveniente en exportar porque este cultivo no es un producto de consumo interno. Respecto a la carne, sobre todo en los faenamientos industriales, se puede decir que los cuartos delanteros son los apreciados por el mercado domestico (asado) y los cuartos traseros son los de exportación; es decir, en el tema carne se puede trabajar más racionalmente que impidiendo las exportaciones de este producto. Hoy Uruguay exporta más carne que Argentina, y mucha producción está migrando al país vecino. Están distorsionado el campo, y la agricultura avanza sobre la ganadería, pero esta última es más amable con el sistema conservacionista y ecológico-forestal. Cuando se hace agricultura se desmonta; en cambio, cuando se hace agricultura, se preserva el paisaje y la tierra.