OTRA MIRADA. Así lo planteó el Partido Obrero. Qué opina esta minoría política del país y de Santiago del Estero.
El pasado 9, en la Universidad Nacional, el Partido Obrero disertó sobre el conflicto entre el campo y el gobierno nacional. El acontecimiento a tres meses de la asunción de la Presidenta, conmocionó a todas las clases sociales del país. El dirigente nacional Daniel Blanco destacó que “la medida correctiva que subió del 35% al 44% las retenciones para frenar el monopolio sojero, el hecho no es más ni menos que un plan para enderezar al país”. Sin embargo, Blanco explicó: “La sojización tiene un vuelco en el gobierno de los Kirchner y ellos dijeron vamos a frenar el negocio de Monsanto”.
Pero hay que hacer una aclaración, dijo Blanco, la devaluación de la moneda posibilitó un modelo de producción para el sector agropecuario, y de colocar sus productos en el exterior. El dólar alto favoreció al campo. Sin embargo, cuál es el problema de fondo, se preguntó.
“Con el dólar alto se favoreció al centro exportador, se pagó 10.000 millones de dólares y al grupo París, unos 6.000 o 7.000 millones de dólares. Este es el gobierno que más pagó la deuda externa en la historia del país”, sintetizó el político ante un auditorio entre estudiantes y adeptos al Partido Obrero.
El dilema
Para esta estructura política nacional, el actual gobierno central está en una encrucijada: “Si le saca al pueblo, con lo cual se viene una revuelta, o le pide al agropecuario que abra el monedero; ya que se favorecieron durante unos años, y ayuden a formar un colchón financiero para sostener el dólar alto”, reflexionó Blanco, al tiempo que puntualizó: “No hay lucha antioligarca, se trata de quitar un poco la renta agraria y traspasarla a la banca internacional”.
Siguiendo la línea de reflexión económica ante un publico que no interrumpía, Banco deslizó: “Hay bancarrota fiscal. Vamos a una crisis por el agotamiento económico. Las retenciones apuntan a frenar la inflación, y no hay manera de desacoplar el sistema. Si se mantiene el dólar alto, pone en peligro la inflación. Hay crisis en el modelo Kirchnerista”.
La propuesta
Con un discurso beligerante y afectuoso, el Partido Obrero diseñó unas propuestas, que en algunos puntos chocan con la política nacional.
Blanco sostuvo que hay una crisis internacional y es necesario implementar un plan radical en el agro. Primero, sostener un salario digno y jubilación para los trabajadores del sector. Segundo, para los 4.000 grupos que manejan el 50 por ciento de la tierra, resulta necesario confiscarla para democratizar las relaciones de poder en el campo, para poblarlo, y no sea manejado por los poderosos. Tercero, devolverle al sector rural su población. Cuarto, por último, el control del comercio exterior para destinarlo a un plan de industrialización , ya que el oro y cobre se exportan en bruto. Es una política de vaciamiento, al contrario, se pretende llenar la industria local.
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